El clima cálido puede hacer que desee salir al aire libre y disfrutar de caminatas por el bosque, picnics, jardinería y más. Pero también surgen pequeñas garrapatas cuando aumentan las temperaturas. Y pueden darle un gran mordisco a la diversión del clima cálido.

Las picaduras de garrapatas infectadas son responsables de aproximadamente medio millón de nuevas enfermedades cada año en los EE. UU. Y esas cifras van en aumento. La enfermedad de Lyme es, con mucho, la más común. Representa más del 80% de las enfermedades transmitidas por garrapatas en todo el país. Otras enfermedades relacionadas con las garrapatas incluyen babesiosis, tularemia y anaplasmosis.

Los síntomas de estas infecciones pueden variar desde erupciones leves y molestias hasta problemas de salud duraderos. Algunas picaduras de garrapatas se han relacionado con una alergia grave a la carne roja.

Sin embargo, hay buenas noticias: puede tomar medidas para evitar que las garrapatas lo enfermen. Y los científicos apoyados por los NIH están buscando mejores formas de diagnosticar, tratar y prevenir enfermedades relacionadas con las garrapatas.

Riesgos de las garrapatas

La posibilidad de que se enferme por una garrapata infectada depende principalmente del lugar donde viva. Diferentes tipos de garrapatas viven en diferentes partes del país. Cada tipo puede transmitir los gérmenes que causan diferentes enfermedades. A nivel nacional, se sabe que más de 17 enfermedades humanas son causadas por al menos nueve tipos de garrapatas. Y todas estas garrapatas se están moviendo hacia nuevas regiones.

“A medida que el clima se calienta y cambia, es probable que veamos más enfermedades transmitidas por garrapatas en más lugares”, dice el Dr. Erol Fikrig, experto en enfermedades relacionadas con las garrapatas de la Universidad de Yale. Él y sus colegas están trabajando para comprender mejor las relaciones entre las garrapatas, los gérmenes que transportan y los animales que infectan.

Las garrapatas pueden parecer fáciles de evitar. No pueden volar ni saltar. Pero pueden detectar calor, aliento y otras señales de criaturas de sangre caliente. Las garrapatas necesitan sangre para desarrollarse y producir huevos. Para encontrar comida, a menudo se aferran a las puntas de las briznas de hierba o de las hojas con las patas traseras. Agitan sus patas delanteras si sienten que usted u otra víctima potencial está cerca. Si roza una garrapata, esta puede trepar y buscar un trozo de piel para picar.

Una vez que una garrapata se clava en la piel y comienza a chupar sangre, los gérmenes que lleva pueden entrar en su víctima. Pero la garrapata puede tardar un par de horas en elegir un lugar y comenzar a alimentarse.

“Si atrapa y elimina una garrapata temprano, y aún no ha tomado una comida completa de sangre, su probabilidad de contraer una infección se reduce considerablemente”, dice Fikrig. Si no quita una garrapata, puede permanecer adherida durante varios días. A medida que se llena lentamente de sangre, la garrapata puede aumentar de tamaño 10 veces o más.

Todas las enfermedades conocidas transmitidas por garrapatas pueden causar fiebre. Otros síntomas comunes incluyen dolor de cabeza, fatiga y dolor muscular. Algunas enfermedades pueden causar erupciones distintivas. La enfermedad de Lyme, por ejemplo, a menudo causa una erupción en expansión que parece una diana. La erliquiosis, la tularemia y la fiebre maculosa de las Montañas Rocosas también pueden causar erupciones.

Alergia inusual a la carne

La mayoría de las enfermedades relacionadas con las garrapatas son causadas por infecciones. Pero hace más de una década, los investigadores apoyados por los NIH descubrieron que ciertas picaduras de garrapatas podrían conducir a una alergia alimentaria. La condición se llama síndrome alfa-gal (AGS). La alergia es a una molécula de azúcar llamada alfa-gal que se encuentra en la carne roja.

“Esto incluye carne de res, cerdo, cordero, venado, conejo e incluso los productos de estos animales, como la leche y los productos lácteos”, dice el Dr. Scott Commins, alergólogo de la University of North Carolina [Universidad de Carolina del Norte]. Trabajó con el equipo de investigación que identificó el vínculo entre la alergia a la carne roja y la picadura de la garrapata estrella solitaria.

“El AGS puede causar urticaria, picazón, hinchazón, dificultad para respirar o malestar gastrointestinal después de comer carne roja”, dice Commins. El AGS a veces puede provocar una reacción alérgica grave llamada anafilaxia, que puede ser mortal sin atención de emergencia. Así que las personas afectadas deben evitar comer carnes rojas.

La mayoría de las alergias alimentarias causan síntomas varios minutos después de comer. Pero los síntomas del AGS tienden a aparecer de tres a seis horas después de comer carne roja. Esta reacción tardía puede hacer que sea difícil darse cuenta de que la culpa es de la carne roja. Los científicos aún no entienden cómo la picadura de una garrapata puede provocar esta alergia.

El AGS es relativamente raro, pero su número está aumentando a medida que la garrapata estrella solitaria se propaga a nuevas áreas. Hoy en día, esta garrapata se encuentra ampliamente desde Texas hasta Nueva Inglaterra.

“En una nota positiva, hay bastante buena evidencia de que, con el tiempo, la alergia puede desaparecer en algunas personas”, dice Commins. “Creemos que evitar las picaduras de garrapatas es clave”. Un simple análisis de sangre puede mostrar si una persona todavía tiene el AGS.

Bloquear las enfermedades transmitidas por garrapatas

Aunque las enfermedades relacionadas con las garrapatas son cada vez más comunes, aún puede disfrutar del aire libre si toma algunas precauciones.

“No tiene por qué tenerle miedo a las garrapatas”, dice el Dr. Sam Telford, investigador de la enfermedad de las garrapatas en Tufts University [Universidad de Tufts]. “Dependiendo de dónde viva, la mayoría de las picaduras de garrapatas no necesariamente conllevan una infección. E incluso si es así, si quita la garrapata de inmediato —duchándose, palpando las garrapatas o buscándolas—, reducirá en gran medida su riesgo”.

Para brindar aún más protección, los NIH respaldan varias líneas de investigación que tienen como objetivo bloquear las enfermedades relacionadas con las garrapatas. Telford y sus colegas se centran en detener la propagación de infecciones transmitidas por garrapatas en la naturaleza. Están probando diferentes formas de evitar que los gérmenes que causan enfermedades infecten a las pequeñas criaturas que a las garrapatas les encanta picar, como los ratones.

“La idea es que si uno aborda los ratones, ya no transmitirán infecciones a las garrapatas. Y luego, presumiblemente, habrá menos garrapatas infectadas en el medio ambiente para infectar a los humanos”, explica Telford.

Fikrig y sus colegas están trabajando para crear un nuevo tipo de vacuna que evite que las garrapatas se adhieran a la piel el tiempo suficiente para transmitir los gérmenes que causan enfermedades. Se ha demostrado que su vacuna experimental previene la enfermedad de Lyme en animales. Están probando para ver si este enfoque puede bloquear otros tipos de infecciones transmitidas por garrapatas.

Fikrig señala que muchas enfermedades relacionadas con las garrapatas se pueden tratar de manera efectiva si se detectan a tiempo. “Si ha estado en un área donde las garrapatas son comunes y tiene fiebre, es posible que le haya picado una garrapata pero no se haya dado cuenta”, dice. “Debe buscar atención médica para obtener asesoramiento. La atención médica temprana siempre es lo mejor”.