Los perros comparten nuestros hogares y entornos. Crecen con nosotros y envejecen con nosotros. Y a medida que envejecen, los perros tienden a tener muchos de los mismos problemas de salud que nosotros, condiciones como obesidad, problemas cardíacos, cáncer y deterioro mental. La mayoría de los genes que se encuentran en los perros también se encuentran en los humanos.

Debido a que compartimos tanto, no sorprende que los descubrimientos relacionados con la salud en las personas puedan conducir a una mejor atención médica para los perros. Del mismo modo, los estudios de biología canina pueden conducir a una mejor comprensión y tratamientos para las personas.

Es por eso que los NIH apoyan proyectos a gran escala que tienen como objetivo aprender cómo el envejecimiento, los genes y otros factores afectan la salud y la biología de los perros. Los científicos se asocian con dueños de perros que comparten información detallada sobre sus mascotas. Los investigadores analizan la enorme cantidad de datos que han recopilado. Luego, comparten sus datos y hallazgos con otros científicos para permitir aún más descubrimientos.

"Trabajar con el público en general ha sido una de nuestras colaboraciones más productivas y fructíferas", dice la Dra. Elaine Ostrander de los NIH, quien dirigió el lanzamiento del Proyecto del genoma canino de los NIH hace más de 20 años. El proyecto tiene como objetivo aprender cómo pequeños cambios en los genes pueden conducir a los muchos comportamientos, formas corporales y enfermedades que se observan en diferentes tipos de perros.

Su equipo ha recolectado muestras de ADN de decenas de miles de perros. Han identificado genes de perros que ayudaron a arrojar luz sobre muchos trastornos humanos. Un estudio reciente encontró factores genéticos que aumentan el riesgo de un cáncer de sangre agresivo que es común en cierta raza de perros. Los hallazgos podrían conducir a tratamientos mejorados tanto para perros como para personas con la enfermedad.

Los estudios de Ostrander a menudo se centran en perros de raza pura. Dado que los padres y la ascendencia de los perros son bien conocidos, es más fácil descifrar las actividades y funciones de genes específicos.

Otro gran estudio, llamado Dog Aging Project, busca incluir a todos los tipos de perros. Estos incluyen mascotas de raza mixta y pura de todas las edades.

"Cuantos más perros tengamos, mejor", dice el codirector del proyecto, el Dr. Daniel Promislow, de la Universidad de Washington. "Más perros nos darán más datos y más poder para hacer más preguntas".

El Dog Aging Project tiene como objetivo hacer seguimiento a los perros durante 10 años o más. Hará un seguimiento de cómo los genes, la dieta, el ejercicio y el medio ambiente afectan la salud y el envejecimiento. "Si podemos entender lo que afecta la salud de los perros, eso será bueno para los perros y bueno para los dueños que aman a sus perros", dice Promislow.

Un estudio reciente encontró que los perros mayores activos tienen menos probabilidades de tener demencia que los perros no activos. Otro encontró que los perros que vivían en ambientes con menos oportunidades para socializar con personas y otros animales a menudo tenían peores resultados de salud. "Estas son relaciones interesantes, pero es importante tener en cuenta que aún no sabemos qué está causando qué", dice Promislow.

Estudiar a los perros a lo largo del tiempo podría ayudar a identificar las posibles causas. Esto puede conducir a una mejor comprensión de por qué la actividad y las relaciones sociales también pueden afectar la salud humana.

"La comunidad de investigación de perros en su conjunto está realmente comprometida con la colaboración. Y compartimos abiertamente nuestros datos", agrega Ostrander. A la larga, este tipo de enfoque cooperativo ayudará a mejorar la salud de perros y humanos.